¡Muy buenas, lectores con neuronas! Mi aportación para el mes de septiembre para el blog va a ser hablaros de cinco maneras y sencillas de volver a conectar con vosotros mismos. ¡Espero que las pongáis en marcha y sobre todo que os resulten útiles! :) 

Posiblemente, por motivos diversos en los que se incluyen familiares, personales, emocionales, académicos y profesionales hayáis notado que perdíais las fuerzas e incluso la ilusión por las cosas. Puede que notarais que vuestra esencia, vuestro yo interior estuviera desapareciendo poco a poco. Y puede que hayáis entregado tanto de vosotros que finalmente, os habéis olvidado de quién sois. Por eso, es tan importante volver a conectar con nosotros mismos para recuperar nuestra energía positiva. ¡Aquí os dejo cinco maneras de hacerlo! 

1. Dedícate tiempo a ti mismo

Esto es obligatorio. La familia, el trabajo y los estudios es importante, pero también lo eres tú. Te recomiendo que saques momentos para ti, para hacer lo que te gusta, para no hacer nada o para desconectar. Para lo que tú quieras, pero no dejes de pensar en ti mismo y en tus propias necesidades. 

2. Lee todo lo que puedas... y más

Elige las lecturas que más te gusten: novelas, poesía, mangas, cómics... lo que más te apasione. Pero lee. Muchos estudios han confirmado que las personas apasionadas por las lecturas tienden a tomarse la vida con más positivismo y optimismo. Además, leer puede llegar a relajarnos, hacernos, reír, soñar y hacernos olvidar temporalmente todos los problemas que tengamos, y quizás cuando terminemos esta actividad, los podamos afrontar con más ganas. 

3. No hay nada de malo en divertirse

Todavía no tengo hijos, pero estoy segura que a veces la vida familiar es complicada y tiene algunos altibajos. De lo que sí soy consciente es que la vida de los estudiantes también es dura y llena de esfuerzo. Por eso, es muy necesario que salgamos a divertirnos, que quedemos con los amigos, que practiquemos los hobbies que más nos gustan. Creedme, no pasa absolutamente porque algún fin de semana dejéis a los niños con los abuelos, tíos, demás familiares o en casa de sus amigos a dormir. Y tampoco es un delito dejar los apuntes a un lado para disfrutar. Seguramente, al desconectar un poco recobréis las fuerzas y las ganas de seguir. 

4. Disfruta de los pequeños detalles

Hay mucha gente que está tan ocupada con su trabajo, estudios o con la rutina familiar que dejan pasar por alto los pequeños detalles de la vida que nos hacen tan felices. Por ejemplo un "te quiero, mamá/papá", "gracias, eres una buena persona" o "has hecho un gran trabajo. Enhorabuena". Esos comentarios, nos hacen no perder la confianza en nosotros mismos. Y además, a veces las cosas sencillas, las que tenemos delante de nuestro ojos y que a veces no damos importancias, son las mejores del mundo y las que nos hacen ser felices. 

5. Las últimas decisiones, siempre las tomas tú

¿Qué quiero decir con esto? Posiblemente, hayáis sentido alguna vez que otra persona tomara las riendas de vuestra vida y os dijera todo lo que teníais que hacer. No dejéis que eso vuelva a pasar nunca más. Podéis escuchar los consejos y las opiniones de vuestros amigos, padres, familia, conocidos... pero la última palabra y la última decisión la tenéis que tener vosotros. De esa manera, estaréis recuperando el sentido de vuestra vida, el derecho de decir "no" todas las veces que sean necesarias y la independencia.